Las ventajas de hacer un curso de cerámica para decorar tu hogar

Probablemente no haya nada más original y personal que tener en nuestro hogar muebles hechos o restaurados por nosotros mismos, así como otro tipo de objetos decorativos. Desde, por ejemplo, la recuperación de un armario antiguo al que, incluso, le hemos conseguido dar un estilo vintage, hasta vasijas, macetas e incluso vajillas completas hechas con nuestras manos utilizando cerámica. Aquí hablamos de un material y un proceso de fabricación que alberga miles y miles de años de historia, y que todavía tiene un enorme protagonismo en nuestros días.

Y es que la cerámica es uno de los inventos humanos más antiguos. Las primeras evidencias de su existencia se remontan antes del periodo Neolítico. Una de las figuras más representativas y vetustas de aquellos primeros usos de la cerámica es la ‘Venus de Dolní Věstonice’, una estatuilla femenina que data de entre el 29.000 a.C – 25.500 a.C y que fue descubierta en la República Checa. Entonces, los fines de los primeros artefactos que se creaban, generalmente siluetas humanas o de animales, eran meramente decorativos o ceremoniales. Para su fabricación se empleaba grasa animal y cenizas de hueso, así como otro material más fino, similar a la arcilla. 

Más tarde, ya en el Neolítico su uso aumentó considerablemente, después del asentamiento de distintas comunidades dedicadas a la agricultura y la ganadería. Se hallaron creaciones hechas con cerámica en Japón, en el Lejano Oriente ruso, en el África Subsahariana, en América del Sur y en Oriente Medio. Fue entre el año 12.000 a.C y el 7.000 a.C, cuando la cerámica a base de arcilla empezó a tener más fines utilitarios y comenzaron a popularizarse los recipientes para agua y alimentos. Aquellos primeros productos se cocían a baja temperatura, por debajo de los 1.000 grados en hornos rudimentarios excavados en la tierra.

Como vemos, el uso de este material se extendió a lo largo y ancho de todo el globo. Y es que la cerámica sirve también para comprender mejor las culturas pasadas. Gracias a ello, se ha llegado a descubrir cómo los lugares con figuras de cerámica de características similares también tenían una cultura muy parecida; mientras, aquellos con culturas distintas pero con algunos signos comunes, eran indicativos de un intercambio cultural subyacente, como podrían ser el comercio o los viajes por su proximidad geográfica. 

Sin duda, uno de los grandes avances de la cerámica se produjo con la invención de la rueda, entre el 4.000 a.C. y el 3.000 a.C. La introducción del torno alfarero permitió la utilización de la técnica de formación de ruedas como revolucionario método para producir objetos con simetría radial. 

Paralelamente, la cerámica fue evolucionando con el uso de pinturas cada vez más elaboradas. Tanto es así, que algunas creaciones se convirtieron en auténticas obras de arte. La cerámica no solo se fue extendiendo cada vez más entre diferentes culturas, sino que la industria experimentaba una profunda transformación, cada vez más enfocada a crear nuevos productos que aprovechaban y rentabilizan aún más las propiedades únicas de los materiales empleados, así como su baja conductividad térmica y eléctrica o su alta resistencia química.

Las ventajas de la cerámica

Este es solo un pequeño, pequeñísimo resumen, de la increíble historia de la cerámica. Pero quizás una de las grandes pruebas de su relevancia es que actualmente el uso de este material sigue en auge. Y no solo eso, es que desde mediados del año pasado la cerámica ha vivido un nuevo ‘boom’ incluso entre los millennials, después de que algunas conocidas influencers con millones de seguidores, compartieron a través de sus redes sociales varios de sus trabajos y creaciones hechas con cerámica. 

Material resistente

A buen seguro que uno de los motivos por los que la cerámica es tan popular es por las evidentes ventajas que ofrece. Hablamos, pues, de un material con una gran resistencia. Tanto al agua, como al fuego. Su nivel de absorción es muy bajo, por eso, su uso es ideal en ambientes húmedos como cocinas o baños. Además, la cerámica no es combustible. Esto quiere decir que no propaga el fuego con facilidad por lo que, además, es bastante segura. 

Sostenible

Se conserva en buen estado durante años y años. Huelga decir entonces que hablamos también de un material con gran durabilidad. Además, es sostenible, ya que para su elaboración y uso se utilizan materiales naturales.

Beneficios para nuestra salud

También conviene mencionar las ventajas de trabajar con cerámica para nuestra salud. El trato con este material tiene una serie de beneficios para nuestro cuerpo, como que nos permitirá mejorar la concentración. Y esto hará que rebajemos nuestros niveles de estrés y ansiedad, ya que la cerámica es un material delicado, que conviene tratarlo con cuidado, por lo que nuestros pensamientos se centrarán solamente en lo que estamos haciendo. Además, a medida que vayamos mejorando en nuestras creaciones, podrá ayudar a nuestra autoestima. Por último, apuntarse a un curso de cerámica hará que indirectamente conozcamos otras personas que compartan nuestro pasatiempo, por lo que servirá para desarrollar nuestras habilidades sociales.

Por todo ello, no es de extrañar que cada vez más personas apuesten por estudiar un curso de cerámica para decorar su hogar. De hecho, la propia actividad de crear con cerámica vuelve a ser tendencia. Ya sea como fórmula para sacarse unos ingresos o como mero pasatiempo, trabajar con cerámica es una de las actividades más desestresantes y ‘mindfulness’ que existen, ya que permiten potenciar nuestra creatividad, mientras nos abstraemos del ritmo frenético del trabajo o el mundo digital, a través de un ejercicio pausado de concentración.

Curso de cerámica de Mamanoalla

Como vemos, no hay duda de que la cerámica ha jugado un papel fundamental en el progreso de la humanidad. En Mamanoalla ya llevábamos tiempo queriendo apostar por las múltiples oportunidades que ofrece la cerámica. Después de muchas vueltas y en la búsqueda de una ceramista de nivel y con una trayectoria profesional consolidada, desde mayo de 2021 contamos con un curso presencial para aprender a trabajar con la cerámica. 

Con nuestra profesional, Fani Sánchez, te adentraras en el mundo de la cerámica partiendo desde cero. Se impartirán y se enseñarán las técnicas básicas (churros, placas, moldes…) para luego trabajar el barro de forma que puedas construir cualquier cosa que necesites o se te ocurra. Además, mientras os introducimos en las técnicas de conformación, os enseñaremos el fascinante mundo de la decoración pre y poscocción para dar los acabados finales a las piezas: desde incrustaciones, texturas, engobes, óxidos, esmaltes, etc. El precio del curso será de 80€ mensuales por dos horas a la semana, con todo el material incluido. 

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